La piedra es un revestimiento excelente para interiores y exteriores y, a pesar de que es de los materiales más resistentes para el hogar, existen algunos cuidados especiales que debemos conocer para mantenerlos en perfecto estado.
Para empezar, a todo revestimiento de piedra se le debe aplicar un sellador, el cual prevendrá la acumulación de polvo y prolongará la calidad y el buen aspecto del acabado.
Para las paredes con revestimiento de piedra es suficiente pasar la aspiradora periódicamente. Si tienes superficies de trabajo con este material, mantenlas limpias pasando un trapo húmedo y un poco de jabón neutro. Para pisos, aunque lo normal en la limpieza de cualquier piso es barrer, aspirar y fregar el suelo con agua y detergente, en los revestimientos de piedra hay que evitar los trapeadores o mechudos, ya que estos solo acumularán el polvo, más no lo limpiarán. Y si llega a derramarse cualquier líquido, límpialo inmediatamente con un trapo húmedo.
Por último y para cualquiera de los casos anteriores, evita limpiadores en polvo y detergentes abrasivos.
Ahora puedes asegurarte de que tus revestimientos serán de larga duración y mantendrán su brillo en tus espacios favoritos.
Fuente: http://llanodelatorre.com.mx/