En muchas ocasiones no nos preocupamos por las cosas del hogar hasta que el desperfecto es notorio. El calentador de agua es una de esas cosas: pensamos que durarán toda la vida porque aparentemente funciona bien, pero ¿cómo notar cuando no es así?
1) Una de las primeras señales que te indican que tu calentador no se encuentra en óptimas condiciones es la fecha de compra. Esta se encuentra en el cuerpo del bóiler o en la parte superior o inferior según el modelo. Si tu calentador cuenta con más de 10 años de uso es muy probable que necesite un reemplazo.
2) Si escuchas ruido al interior de este cuando lo enciendes probablemente ha generado una capa de sedimento en el fondo, es decir, los minerales que contiene el agua crean una capa que hace que el calor no se distribuya correctamente, lo que provoca que tu calentador necesite más gas.
3) Si detectas que hay agua debajo del calentador o que la llama en lugar de ser azul es naranja o roja quiere decir que algo está obstruyendo la salida adecuada de gas. Ante estas situaciones es importante que dejes de utilizarlo, le retires la conexión directa con el gas y que lo lleves a reparar. Para ello es importante que, al adquirirlo también te den la garantía del mismo. Si sucede un desperfecto estarás respaldado por tu compra.
Si decides que tu calentador ya no cumple con los requerimientos necesarios y que pone en peligro tu hogar, asegúrate que, al enviarlo a la basura nadie pueda hacer uso de él. Prevenir es la mejor forma de mantener todo en orden y que tú y tu familia estén siempre seguros.
Fuente: https://llanodelatorre.com.mx/