En ocasiones no contamos con la liquidez financiera para llamar a un experto del hogar, o simplemente no queremos gastar tanto dinero en una reparación menor, por eso debemos estar preparados para llevar a cabo reparaciones simples en casa, como estas:
¿Tienes papel tapiz y quieres cambiarlo por uno más moderno? No lo arranques, mejor prepara una mezcla de agua con vinagre -en igual proporción- y moja las paredes. El papel tapiz saldrá sin problemas. Si hay una fuga localizada en las tuberías de la cocina o el lavamanos, lo primero que debes hacer es cerrar el suministro del agua. Posteriormente, con ayuda de un cubo, desenrosca la tubería dañada, aprovecha para limpiar el resto de la tubería y, una vez cambiada, vuelve a abrir el suministro del agua.
Cambiar un interruptor puede sonar difícil, sobre todo cuando tomamos en cuenta que es electricidad, pero lo que debes hacer es cortar la corriente bajando las pastillas, y después quitar la tapa. Los tornillos estarán conectados a unos cables, que son los que debes conectar al nuevo interruptor. Después vuelve a poner la tapa del interruptor y restablece la energía eléctrica.
Si te enfrentas a un WC tapado, la primera opción es usar una bomba para tratar de desatascarlo. Si no funciona, otra opción es usar una barrena que, aunque ya es una herramienta más especializada, te puede ahorrar el servicio del fontanero.
Tu piso es de madera, pero tiene unos cuantos arañazos…¿deberías pensar en cambiarlo? ¡Mejor espera y trata con esta solución! Compra cera del mismo tono que la madera y colócala en los rayones, después enciende la secadora de cabello en aire caliente y pásala por el piso. El calor fundirá e integrará la cera en el piso y, al ser del mismo color, podrás mejorar su aspecto.
Tú mismo puedes comenzar a reparar tu hogar, dándole el toque que siempre has querido y, cuando se trate de reparaciones más grandes, entonces sí puedes considerar llamar a un profesional para que haga el trabajo.
Fuente: http://llanodelatorre.com.mx/